Por Olga Agudelo, docente de Primaria.
El niño es un pequeño ser que sale al mundo a experimentar un sinfín de acontecimientos que estructuran su vida y van constituyendo sus intereses, necesidades y propósitos. En la medida que pasa el tiempo el adulto se convierte, para el niño, en un modelo a seguir; en un ejemplo de lo que se debería ser y hacer.
Por eso, es fundamental para el niño poder vivir experiencias, y sentir que se le reconocen todas las cosas buenas que hace. Labor que deben ejercer sus mayores, siendo los principales referentes sus docentes, padres y abuelos.
Guiemos a nuestros niños, orientemos sus procesos y juntos construyamos una mejor sociedad.